El país de las armas


Tras la última masacre en Newtown el debate sobre el control de armas ha saltado de Nuevo a las portadas. Y de nuevo, la gente que nunca quiere hablar sobre ello es la que dice que sería insensible hacerlo ahora. “Demasiado pronto”, dicen.

El problema es que los tiroteos están amontonándose. Y justo cuando el periodo de duelo por el de Portland estaba acabando –y acorde con la Asociación Nacional del Rifle (NRA), está bien hablar sobre ello- llegó el de Newtown.

Como mucha gente ha señalado no es que sea demasiado pronto. En realidad es demasiado tarde. Todo esto debería haberse discutido antes. Sería lógico pensar que después de que una Congresista fuera atacada, el tema habría cobrado más importancia. Pero no.

Algunos de los que se oponen al control de armas creen que el gobierno les quitaría las armas de las manos. Pero tienen que comprender es que un mayor control no implica prohibición y aun sería posible conseguir armas. Sólo que de forma más controlada. Y hay muchísimas razones para hacerlo.

Una excusa común es la de una deficiente cobertura de salud mental que no identifica y trata a sujetos peligrosos es la culpable. Curiosamente, la mayoría de éstos son más cercanos a posiciones Republicanas que Demócratas. Y ellos también se opusieron a Obamacare. Es fácil imaginar qué tendrían que decir sobre impuestos yendo a financiar una cobertura de salud mental universal. Es más fácil armar a todo el mundo, al parecer.

No es que sea la única contradicción de los Republicanos. Se oponen al control sobre las armas, pero insisten en controlar las comunicaciones, qué pueden o no hacer las mujeres con sus cuerpos, con quién se puede casar cada uno o cómo identificar a los inmigrantes en plena calle. Libertad selectiva, según parece.

Resultaría interesante destacar que bastó un solo terrorista suicida con una bomba en los zapatos para que ahora todos sin excepción debamos descalzarnos en los aeropuertos. Sin embargo, da igual cuántos tiroteos o muertes por armas de fuego haya.

Los simpatizantes del NRA citan con frecuencia a Suiza e Israel como países con leyes sobre armas tan permisivas como las americanas pero ambos han endurecido recientemente las condiciones para acceder a las armas. Australia hace décadas que aplicó leyes al respecto y los números hablan por sí solos. En Japón, se ha conseguido reducir el número de muertes por armas de fuego a menos de 20 al año.

El otro ejemplo de un país con leyes tan permisivas como Estados Unidos es Finlandia. Curiosamente, ambos países encabezan el ranking de tiroteos con civiles envueltos.

En cuanto a la Segunda Enmienda, es comprensible que en la América post-independencia fuera necesario crear una milicia. Pero ahora es un anacronismo.

Mi mente europea es incapaz de concebir cómo los ciudadanos del país con el ejército más poderoso del mundo se sienten tan inseguros como para necesitar tener en casa un arma. Por no hablar de los rifles de asalto.

Y en cuanto a delincuentes comunes, si sólo los que deben preservar la ley y el orden -como policías- llevaran armas, no habría necesidad de llevar nada para defenderse.

“Eso no va a parar a alguien que quiera hacer daño” es otra de las excusas del NRA. Y en eso coincido. Ni siquiera las leyes más estrictas detendrán a un lunático, como pasó en Noruega. Pero al menos, la frecuencia y la gravedad de los incidentes sería mucho menor.

Quítale el arma a un lunático y encontrará otra manera de hacerlo. Pero probablemente sea una manera menos letal. Como un cuchillo. Justo el mismo día de la masacre, un loco entró en una escuela en China armado con un enorme cuchillo de carnicero. Hirió a 22 niños, pero ninguno ha muerto.

¿Cuántos muertos más hacen falta para tomar cartas en el asunto? Hoy mismo ha habido otro tiroteo en Colorado con cuatro muertos. Y mientras tanto, las ventas de armas no hacen más que aumentar, como en ocasiones anteriores, con la prensa actuando más como un agitador que como un elemento de razón.


  • Digg
  • Del.icio.us
  • StumbleUpon
  • Reddit
  • Twitter
  • RSS

El derecho a ofender y ser ofendido


Los últimos acontecimientos alrededor de la broma al hospital de Kate Middleton me tienen alucinado. Pero no por la misma razón que al resto del mundo, más bien al contrario.

Para los que han vivido aislados la última semana y no saben de qué hablo: Kate Middleton ingresó en el hospital por una dolencia menor. Dos DJs de una radio australiana decidieron llamar al hospital, imitando la voz de la reina, para intentar hablar con la duquesa. Era todo una broma.

La sorpresa vino porque aunque no consiguieron hablar con Kate Middleton, la enfermera les creyó y les dio un informe de su evolución. La opinión pública se mostró furiosa de cómo se había llevado todo el asunto y a los dos días la enfermera del incidente apareció muerta, aparentemente tras suicidarse.

Esa misma opinión pública, capitaneada por la prensa británica -y no sólo los tabloides- pide ahora la cabeza de los DJs, Scotland Yard quiere interrogarlos y todo el mundo en Inglaterra les culpa de la muerte de la enfermera.

Un montón de mierda.

Para empezar, un suicidio es más complejo que todo eso y sería estúpido culpar a un único acto. Ese acto puede ser el desencadenante, pero sería sólo la punta del iceberg.

Es más, quienes hicieron grande la historia en primera instancia -la opinión pública y la prensa británica- son los que deberían culparse. Ellos son los que crearon la presión sobre la pobre enfermera que simplemente fue la víctima de una broma -que ni siquiera era graciosa, pero tampoco cruel.

Nadie protestó por esto
Tampoco es que eso sea tan raro. Hace unos meses la opinión pública y medios de todo el mundo rieron a carcajadas la metedura de pata de una anciana española al “restaurar” una obra de arte en una iglesia. Incluso Conan O’Brien en Estados Unidos se hizo eco de ello.

La presión sobre la pobre señora fue descomunal, que instantáneamente se convirtió en un fenómeno de Internet. Pero a nadie pareció importarle.

Idealmente, esta broma debería haber hecho sonar las alarmas en el servicio secreto y mejorar la seguridad y los filtros alrededor de la familia real. Y ése debería ser el verdadero debate, cómo dos simples locutores de radio lograron romper el cordón y llegar a un proveedor de información confidencial tan fácilmente.

Sin embargo, la misma opinión pública y medios que montaron la presión social que puede que empujara a la enfermera a suicidarse, esos mismos ahora montan más presión social para que despidan a los dos DJs. ¿Quién será el siguiente?

  • Digg
  • Del.icio.us
  • StumbleUpon
  • Reddit
  • Twitter
  • RSS

La sinrazón de los asentamientos

Me suelo considerar una persona bastante equilibrada y justa. En cuanto al conflicto entre Israel y Palestina, creo que ambos bandos tienen su parte de razón.

Sin embargo con los asentamientos soy estricto: son un obstáculo para la paz o para una posible solución de dos estados -lo que sea que venga antes.

En una ocasión tuve la oportunidad de hablar con una judía americana de Nueva Jersey. Fue una conversación interesante, educada y civilizada con una mujer con amplia formación. Hacia el final, empezamos a hablar de los asentamientos con posturas opuestas.

Cuando a cada cuestión le respondía con argumentos sólidos contra los colonos basados en leyes internacionales o el sentido común, esta mujer educada y con amplia formación no tuvo más remedio que aceptar que tenía razón.

- Pero entonces, ¿por qué Israel sigue construyendo?
- Porque podemos.

Ése “porque podemos” me pilló a pie cambiado. Que viniera de una persona que sabía de lo que hablaba y que, insisto, me había dado la razón me parecía aun más inverosímil.

Pero en realidad eso parece resumir la actual posición israelí en el tema de los asentamientos. Lo hacen porque pueden.

Photo by: pinky_again/flickr
Tienen las espaldas guardadas por Estados Unidos, el único arsenal nuclear de Oriente Medio y la mayor potencia militar regional. 

Y hasta que esto no cambie, no importa cuántas resoluciones tome la ONU. Israel continuará ocupando lo que consideran como su derecho divino.

Algo que, por sí solo, nos daría de sobra para hablar durante horas.

  • Digg
  • Del.icio.us
  • StumbleUpon
  • Reddit
  • Twitter
  • RSS